En la ronda negociadora celebrada en Rabat únicamente se ha llegado al acuerdo de que tanto los responsables de a administración comunitaria como de la marroquí se reunirán próximamente, sin fecha fija.

No obstante, se han establecido cauces para la apertura de un proceso de negociación, con las exigencias del Gobierno alahuita sobre la mesa, que rechazó la propuesta comunitaria de reducir levemente las capturas y pide un mayor recorte (de hasta el 50% para algunos productos).

Pese a que desde la UE se ha calificado de "positiva" la receptividad de los mandatarios de Marruecos, esto no se traduce en solucines concretas a los obstáculos que impiden que se llegue a un acuerdo satisfactorio, según fuentes próximas a la negociación.