Los freseros estiman que el daño ya ha sido hecho, ya que la campaña de recolección de la fresa acaba de terminar y más de 250 toneladas de esta fruta fueron destruidas por los agricultores del país vecino.

Al menos, esperan que las medidas tomadas por la UE eviten que el próximo año se vuelvan a producir incidentes como los de esta temporada.

En la campaña de recolección de fresa de este año pariciparon en la provincia de Huelva, la principal productora del país, alrededor de 40.000 temporeros, que recogieron cerca de 190.000 toneladas de fresa.

El ministro de Agricultura, Luis Atienza, anunció recientemente que España ha decidido denunciar los incidentes provocados por agricultores franceses a través de la UE y que ésta tome partido, "porque no es un problema bilateral".