En concreto, perdió un 1,3% de competitividad, si se le compara con la media de los países de la UE-15, y un 3,7%, si se toma como referencia la competitividad del sector exterior de los países de la OCDE.

Así lo reflejan los Índices de Tendencia de Competitividad (o ITCs), que publica trimestralmente el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, a través de la Secretaría de Estado de Comercio.

Dichos indicadores permiten analizar la competitividad del sector exterior, comparando para ello la evolución de los precios españoles respecto a los de otros países con los que España mantiene relaciones comerciales.

Los dos indicadores publicados se diferencian por los índices de precios que toman como referencia. En este sentido, uno de ellos toma como referencia los índices de precios al consumo (IPCs), mientras que el otro utiliza los índices de valor unitario (IVUs) de las exportaciones.

Atendiendo al IVU (precios de importaciones y exportaciones), la pérdida de la competitividad española fue más "pequeña", del 0,3% interanual, en comparación con la UE-15 y del 0,5%, con la OCDE.

Industria atribuye esta "ligera pérdida de competitividad" al aumento del tipo de cambio.