Pujol considera que Eguiagaray debería ser más ágil en las negociaciones para lograr una solución a los problemas de la empresa automovilística, aunque aseguró creer "en la buena fe del ministerio, en las ganas de resolver la situación", a pesar de que "a veces, en estos momentos, al Gobierno central le falta un poco de nervio".

El presidente catalán anunció, en declaraciones a Catalunya Ràdio, que el próximo lunes tiene previsto viajar a Hannover (Alemania para cenar con el presidente del land alemán de la Baja Sajonia, Gerhard Schroder, que es el primer accionista de Volkswagen, y con el presidente de la multinacional, Ferdinand Piech, y que una de las cuestiones que debatirán ampliamente será la de la crisis de Seat.

En su opinión, la presión de Volkswagen para que se desbloquee la concesión de ayudas y la amenaza con desmontar progresivamente la empresa española si antes del día 30 de este mes no se consigue una solución, información que publica hoyel diario "Cinco días", es "legítima", y añadió que "a veces esto se hace en las negociaciones". No obstante, indicó que las declaraciones de Piech son "un poco tácticas, para hacer presión" sobre el Gobierno.

SINDICATOS

Por su parte, los sindicatos de Seat permanecen a la expectativa de la evolución de los acontecimientos después de conocerse la advertencia de Volkswagen, ya que en las factorías de Martorell y Zona Franca "se trabaja como siempre", según explicó a Servimedia el portavoz de UGT en l empresa, Josep Pujol.

Los representantes sindicales no han pedido explicaciones a la dirección de la compañía ni han mantenido aún ninguna reunión entre ellos a raíz de la noticia, porque consideran que de momento "es un asunto de las altas esferas" que se debate "en la prensa".

Según Josep Pujol, "se trata de ataques y contrataques para conseguir más ayudas y subvenciones, y cada parte juega sus cartas en este asunto".