"Yo creo que el Gobierno de Navarra está actuando con un escaso rigor. No tiene una opinión definida sobre la situación de Landaben y me parece que es lamentable cuando estamos hablando de más de 20.000 puestos de trabajo que afectan a Navarra", afirmó Félix Taberna.

El parlamentario de IU recordó que, en un primer momento, el vicepresidente navarro, Miguel Sanz, se pronunció en favor de la segregación de la factoría de Seat y de la compra por la multinacional alemana Volkswagen y posteriormente, tras unas declaraciones del ministro de Industria, Juan Manuel Eguiagaray, en las que se mostró contrario a la segregación de Landaben, Sanz se desdijo de sus palabras y cambió de opinión.

Taberna precisó que Izquierda Unida se opone a la segregación de la planta de Pamplna y pidió que se incremente el capital de la firma automovilística española con la entrada de dinero proveniente de Volkswagen, el Ejecutivo central y los gobiernos catalán y navarro.

Por su parte, el vicepresidente del Gobierno navarro, Miguel Sanz, señaló hoy en rueda de prensa que "se impone la prudencia" y añadió que "en ninguno de los pronunciamientos públicos realizados por los directivos de Volkswagen se pone en riesgo la viabilidad de la planta de Landaben y, en cualquier caso, es responsabildad del Gobierno de Navarra estudiar los mecanismos técnicos adecuados para que dicha operación tenga el menor costo fiscal para la Hacienda Foral".