La concesión de los créditos, por un valor total de 6.000 millones de pesetas para las empresas de proveedores, se gestionará a través del Instituto Catalán de Finanzas.

El consejero de Industria explicó que estas ayudas, destinadas a minimizar los efectos de la crisis de Seat, se repartirán en cantidades que rondarán los 300 ó 400 millones de pesetas para cada empresa.

Subirà señaló que el Instituto Catalán de Finanzastiene capacidad suficiente para desarrollar esta operación y añadió que la dirección de Volkswagen se había comprometido, durante los últimos contactos mantenidos con la Administración catalana, a aumentar la producción de componentes fabricados en España por un importe de 35.000 millones de pesetas.

Por su parte, el presidente de la Confederación Catalana de Automoción, Joan Llorens, expresó su satisfacción por la medida adoptada por el Gobierno catalán, aunque matizó que la principal preocupación paa los proveedores de Seat que se instalen en Zona Franca será la competitividad de sus productos.