Saura expresó, en declaraciones a Radio Nacional y a la Ser recogidas por Servimedia, su optimismo y su convicción de que, finalmente, habrá acuerdo y la propuesta de reforma llegará al Congreso de los Diputados.

Se mostró convencido también de que en el Congreso habrá negociación, aunque se deberán fijar aspectos exentos de modificación, como las competencias, los derechos de ciudadanía, la igualdad jurídica de catalán y castellano, y los ejes de la financiación.

Saura reconoció que las Cortes Generales son "soberanas" y pueden, por ello, opinar sobre la reforma e incorporar modificaciones.

Pidió, en consencuencia, que se huya de la idea de que nada es modificable, pero también de la tentación de algunos de "esconderse detrás de la Constitución para no hacer el debate político".

Pese a que la Mesa del Parlamento catalán ya ha fijado la última semana de septiembre para el pleno que debe aprobar la reforma, Saura aseguró que existe aún margen para el acuerdo y que los dos grandes obstáculos, los derechos históricos y la financiación, se resolverán.

Saura responsabilizó del aparente parón actual a CiU y al PP. A los primeros les reprochó su negativa a negociar los ejes de la financiación. "A veces me pregunto si su objetivo es que haya Estatuto o que no lo haya, a veces dan la sensación de que estarían contentos si no lo hubiera", comentó.

De los dirigentes del PP lamentó que en Cataluña estén permanentemente "supeditados" a lo que diga el presidente del partido, Mariano Rajoy.