Los empleados piden una subida salarial del 4,3 por ciento aplicable desde el año pasado, mientras que la dirección de Santana ofrece un incrementeo del 3,38 por ciento.

Los trabajadores permanecieron desde primeras horas de la mañana concentrados ante la puerta de la planta para impedir la salida de piezas y componentes hacia las factorías de Linares (Jaén) y Oviedo (Asturias).

La huelga transcurre sin incidentes significativos, salvo ls fotografías que realizaron directivos japoneses a los trabajadores que se concentraron ante la factoría. Según fuentes del comité de empresa, tras conversar con representantes de la multinacional japonesa Suzuki, propietaria de la planta, éstos entregaron a los trabajadores los carretes de fotos.