En opinión del Vaticano, es necesario permitir a las mujeres "el poner en obra sus capacidades para participar a su propio desarrollo y al de toda la sociedad y asegurar un justo equilibrio de las fuerzas de trabajo en el seno de la sociedad reconociendo la importancia del trabajo familiar".

También reclama que se facilite el acceso de la mujer a los puestos de responsabilidad en todos los ámbitos, y que se prosiga la ucha contra todas las formas de pobreza, en particular contra la desocupación y la marginación, así como contra el analfabetismo.

MAYOR DIGNIDAD

El Vaticano hace una llamada de atención sobre la vida de la mujer que "permanece más precaria y más vulnerable que la de los hombres, ya que soporta sola, demasiado frecuentemente, la mayor parte de las responsabilidades de la familia, de la educación de los hijos y de la vida material cotidiana, lo que crea un sentimiento de insatisfacción y de fatiga quese traduce, entre otras cosas, en el hecho de que no puede desplegar todas sus capacidades reales, ni participar activamente en la vida pública".

También denuncia que el modelo de sociedad actual, en el que prima el provecho familiar, "perjudica particularmente a la mujer y a la estima que puede tener en si misma, ya que una gran parte de las tareas que desempeña no se pueden contabilizar".

Ante esta situación, propone, entre otras medidas, que la sociedad deje espacio suficiente a la expresión d las mujeres y se promueva su participación activa en la vida social, política y cultural.

Por otra parte, el informe del Vaticano, difundido hoy en sus lineas maestras por la Conferencia Episcopal de España, lamenta la ausencia de una política global frente a la prostitución y hace una llamada de atención contra la explotación sexual de los jóvenes.