En su contestación, el Ejecutivo español garantiza a los grupos de oposición que Santa Bárbara mantendrá, tras su adjudicación a General Dynamics, la actividad de todos los centros de trabajo y de las plantillas actuales, así como la inversión, la transferencia de tecnoogía y el incremento de su mercado.

Un mes después de la `cumbre` hispano-alemana en La Granja (Segovia), en la que el canciller alemán, Gerhardt Schroeder, puso toda la carne en el asador para convencer a José María Aznar de la necesidad de vender Santa Barbara a un consorcio europeo, el Ejecutivo mantiene en su respuesta parlamentara que el plan presentado por general Dynamics "contempla una considerable mejora de la situación financiera, económica y tecnológica, y el comprador garantiza los compromsos asumidos mediante cláusulas penales".

El Gobierno recuerda que el plan puesto en marcha en 1996 para conseguir la viabilidad de Santa Bárbara contemplaba un proceso de redimensionamiento, el fortalecimiento de las actividades de I+D, y un amplio programa de inversiones para mejorar la competitividad de la compañís y su posición en los mercados.

Para culminar con éxito ese proceso, prosigue, "resultaba imprescindible fortalecer su situación societaria, a través de un accionista privado con capcidad tecnológica, industrial y comercial suficiente, que garantizara a la compañía un volumen de negocio estable, al mismo tiempo que permitiera seguir atendiendo los requerimientos de la defensa nacional".

Con este objetivo, la Sociedad Española de Participaciones Industriales (SEPI) inició a finales de 1998 la privatización de Santa Bárbara.

Tras el análisis de las ofertas recibidas, el Consejo de Administración de la SEPI ha aprobado la adjudicación de la empresa a General Dynamics, valorandoante todo el plan de futuro presentado, "que resultaba el más beneficioso para la integridad y permanencia de la empresa y, en especial, para el mantenimiento de los puestos de trabajo y de su actividad".

El presidente del Gobierno, José María Aznar, negó categóricamente el pasado 16 de septiembre en la `cumbre` de La Granja que el asunto de Santa Barbara estuviera enrareciendo sus relaciones con Schroeder. Hizo stas afirmaciones después de que se publicara una información, según la cual Alemania amenzaba con retirar al Ejército Español un centenar de tanques `Leopard` alquilados si no se vende la empresa española al consorcio alemán.

A este respecto, Aznar aseguró que "el Gobierno español no tiene ningún plazo para tomar ninguna decisión, lo cual digo porque de vez en cuando oigo que el Gobierno aplaza su decisión sobre Santa Bárbara".