Junto a las denuncias por muerte, el informe recoge que en el mismo período se produjeron otras 753 denuncias por daños físicos, y que fueron presentadas por los afectados contra us médicos por vía judicial o administrativa.

A este cerca del millar de denuncias -sumando las de muerte y las de daños físicos-, se añaden otras 2.700 presentadas en el mismo período contra los sistemas sanitarios públicos de Cataluña, Comunidad Valenciana, Galicia, Andalucía y el País Vasco.

La dolencia que más reclamaciones está generando son los infartos, que con frecuencia son mal diagnosticados por los médicos que envían a casa a los pacientes sin hacerles siquiera electrocardiograma, que an sólo cuesta 2.300 pesetas.

Los inspectores médicos que han realizado esta investigación para el Insalud han estimado que en el 57% de los casos de infarto en los que los afectados o sus familiares han denunciado negligencia médica, éstos tenían razón.

El Insalud ha pagado ya por una parte de las negligencias médicas contabilizadas desde 1995 unos 1.000 millones de pesetas, cantidad a la que habría que sumar los casos que están en los tribunales y en los que las víctimas podrían obtener una senencia favorable.