SANIDAD DICE QUE LAS BOMBAS DE INFUSION CONTINUA DE INSULINA DEBEN SER PRESCRITAS POR ESPECIALISTAS Y EN CASOS "EXCEPCIONALES"
- La posible financiación de estos sistemas de administración de insulina será debatido en una próxima reunión del Consejo Interterritorial
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El Ministerio de Sanidad y Consumo considera que el uso de las bombas de infusión continua de insulina deben indicarse sólo en el ámbito de la Atención Especializada y para pacientes "excepcionales", según afirmó hoy el secretario General de Sanidad, Rafael Pérez Santamarina.
En su comparecencia ante la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados, Pérez Santamarina argumentó esta posición "en atención a que estos productos sanitarios tienen unas caracterísiticas especials de ajuste de la dosificación, control riguroso del medicamento y posibles incidencias en la aplicación que recomiendan su uso en este ámbito".
Sin embargo, señaló que Sanidad continúa estudiando su posible inclusión en las prestaciones financiadas del Sistema Nacional de Salud. Ante la disparidad de criterios de las CCAA respecto a este asunto, el año pasado la comisión de prestaciones del Consejo Interterritorial acordó elaborar una propuesta consensuada.
El secretario general de Sanidad afirm que el ministerio incluirá este tema en una próxima reunión del Pleno del Consejo Interterritorial.
Recordó que ante la petición de las asociaciones de diabéticos sobre la posible financiación pública de estos sistemas de infusión continua de insulina, Sanidad encargó en 2000 a la Agencia de Evaluación de Tecnologías Sanitarias del Carlos III un inmforme sobre la efectividad de estas bombas, que fue hecho público en julio de 2001.
El informe comparó los sistemas de inyecciones múltiples subcutánas frente a las bombas de infusión, y concluyó que los buenos resultados obtenidos por la insulinoterapia intensiva son análogos.
Los técnicos recomendaban el uso de los sistemas de administración continua en el caso de embarazadas y en aquellos otros pacientes que no se haya controlado con las inyecciones múltiples, y que los usuarios deberían ser rigurosamente seleccionados.
Pérez Santamarina reconoció que, aunque el informe constataba la escasez de estudios que hasta el año 2000 valorarán el ipacto del uso de bombas de insulina sobre la calidad de vida de los pacientes, hoy sí que existen.
(SERVIMEDIA)
01 Abr 2003
EBJ