El Servicio de Continuidad de Cuidados para la Atención Domiciliaria se basa fundamentalmente en la figura de la enfermera de enlace, quien se ocupa de gestionar los cuidados domiciliarios de forma coordinada con todos los profesionales sanitarios de la zona entre niveles asistenciales y entre los sectores implicados (centros de día, residencias,etcétera).

La directora del Área de Salud de La Palma, María Rosa de Haro, explica que estos profesionales atienden a "personas con una especial situación que precisan de ayuda sanitaria y emocional en su vida diaria".

Los receptores de estos servicios son diversos, pero fundamentalmente se trata de personas mayores con pluripatología y deterioro funcional, con una dificultad para valerse por ellos mismos que no les permite acudir a su centro de salud.

También son personas que, tras una alta hospitalaria, continúan convalecencientes y no pueden desplazarse a su centro de salud, explicó, así como usuarios con una patología o enfermedad terminal, personas cuidadas en centros sociosanitarios adscritos al centro de salud, mayores de 80 años o más, que no estén incluidos en los grupos anteriores y cuidadores principales de personas susceptibles de atención domiciliaria.