En algunos casos las acciones han concluido con la imposición de multas de hasta 5 millones de pesetas por vertidos de aguas residuales, derivación de aguas públicas y detracciones de las mismas.

Este acuífero está sometido a extracciones superiores a la recarga media interanual producida por efecto de las precipitacioes y otras fuentes hidrológicas.

El descenso del nivel de las Lagunas de Ruidera, que se alimentan de su drenaje natural, llevó a la Confederación Hidrográfica del Guadiana a declarar sobreexplotado el acuífero 24 en junio de 1989.

Esta declaración implicaba medidas restrictivas muy rígidas para la utilización de sus recursos y un exahustivo control y vigilancia de los vertidos.

José Borrell, ministro de Obras Públicas y Transportes, se encuentra hoy en Ciudad Real, con motivo del viaje ofical que realiza por Castilla-La Mancha.

Borrell ha confirmado que este acuífero está sobreexplotado y que, por lo tanto, no se podrá extraer agua de él, "ya que el deterioro de las Lagunas de Ruidera es considerable".

El ministro aseguró que para hacer cumplir la legislación su departamento tiene previstas multas de hasta 7 millones de pesetas para los infractores, superando así en 2 millones las cantidades que ya se habían pedido.

El acuífero 24 tiene una superficie de 2.700 kilómetros cuadrdos y cuenta con unos recursos de 175 hectómetros cúbicos.

En cuanto al acuífero 23, que abastece a las Tablas de Daimiel, Borrell señaló que se llegará a un acuerdo de explotación entre las partes afectadas y añadió que este año se han hecho trasvases de caudales suficientes.