Sánchez Montero hace estas consideraciones en su libro de memorias "Camino de Libertad", que pondrá a la venta próximamente la editorial "Temas de hoy", y que incluye un capítulo dedicado al análisis de la situación de la izquierda escrito con posterioridad a la ruptura interna enIU, plasmada en el Consejo Político de esta formación del pasado 27 de setiembre.

El histórico dirigente del PCE, uno de los lugartenientes de Santiago Carrillo durante la etapa de la transición, denuncia "el carácter estalinista que domina la política de la dirección central del Partido y de la mayoría de las direcciones regionales. Quiero dejar claro que no dudo de la honradez de estos camaradas; critico lo que considero un error político".

Sobre la expulsión de NI y la ruptura de relaciones co Iniciativa, señala que le parecen "equivocadas, injustas y muy graves esas medidas, por el daño que hacen a IU y a toda la izquierda. Me parecen, además, una vergüenza para el PCE, el Partido de la izquierda que más ha luchado por la unidad de las fuerzas progresistas y, más allá, por la reconciliación de todos los españoles, para acabar con la dictadura fascista de Franco e imponer la democracia para todos, una política que no tiene precedentes en ningún país importante".

Sánchez Montero se pregunta "¿quien tiene la culpa de que, teniendo más votos la izquierda, gobierne la derecha?. Evidentemente, la izquierda. Y entre las fuerzas de izquierda, las más responsables son el PCE e IU, pues, por su aspiración de realizar la transformación social, son las fuerzas más interesadas en la unidad de la izquierda".

"Pero ya he dicho y repito que el PCE, con su dominio cada día más claro y directo sobre IU, está dificultando que ésta pueda desarrollarse. Y lo que es peor, si el PCE sigue con su política, I puede desaparecer en la práctica", añade.

Sánchez Montero muestra su apoyo a la propuesta de diálogo lanzada por Joaquín Almunia señalando que los puestos que propone para el acuerdo "pueden constituir la base para iniciar y conseguir un acuerdo concreto inicial".

"Creo sinceramente que sería intolerable que IU rechazara la propuesta del PSOE en las condiciones en que está redactada. Y exigiría medidas políticas muy serias en IU para evitar ese rechazo. Pienso también que en ese acuerdo deberíanparticipar también Nueva Izquierda, Iniciativa per Catalunya y todas las fuerzas políticas democráticas", concluye.