San Segundo respondió así al senador del PP Adolfo Abejón, quien aseguró que el proyecto del Ejecutivo tiene "olor a rancio" y promueve un modelo educativo basado en "la falta de valores, el despego por el estudio, el fracaso escolar y el adoctrinamiento político".

La titular de Educación aseguró que el derecho de las familias a elegir centro está plenamente garantizado, tal y como reconoce el Consejo de Estado en el informe de legalidad que acompaña a la LOE y que estable la "perfecta constitucionalidad" del texto y el respeto a los derechos establecidos en la Carta Magna.

Además, dijo la ministra, los alumnos tendrán plaza de manera automática cuando el número de solicitudes no exceda el de puestos escolares de un centro. El problema se plantea cuando el número de solicitantes supere el de plazas.

En esos casos, en los que "la ley tiene que establecer quién es admitido en un centro", dijo San Segundo, "es nuestra responsabilidad y lo hacemos con criterios objetivos y transparentes, porque así estamos protegiendo el derecho de las familias".

El objetivo último de la ley que el Gobierno ha llevado al Parlamento es que sean las familias las que estén asistidas por el derecho a alegir centros y que no sean los centros los que "eligen a los alumnos", agregó.

San Segundo insistió en que no hay ningún artículo de la LOE que impida esa libertad de elección y atribuyó a "interpretaciones creativas" del PP esos "miedos infundados" sobre la libre elección de centro.