Según afirma en un comunicado el presidente de DMD, Salvador Pániker, "en su día recibimos un paquete conteniendo el vídeo y, una vez conocido su contenido, lo reexpedimos a la juez que instruye el caso Sampedro".

En la ota, Pániker señala que la asociación no se siente autorizada a difundir públicamente el citado vídeo, ya que "suponemos que el hecho de haberlo recibido responde a la voluntad del propio Sampedro, quien nos hizo depositarios de su confianza, como también nos hizo depositarios de su último testamento".

Por último, el presidente de DMD reitera que el papel de la asociación ha sido "exclusivamente" el de ser depositaria de la confianza de Sampedro, "a quien habíamos asesorado jurídicamente durante añoscon quien habíamos compartido una misma lucha".