"Aunque pueda favorecer a la lucha que mantenemos por la eutanasia voluntaria, hubiese preferido queno se difundiese así por respeto al señor Sampedro, porque morir es un acto muy íntimo", dijo Pániker, para quien la cinta demuestra que se trata de un suicidio y no de un asesinato.

Tras recordar que la asociación DMD tuvo en sus manos el vídeo de la muerte del tetrapléjico, Pániker reonoció que Ramón Sampedro no les dio nunca instrucciones, ni en un sentido ni en otro, acerca del uso y difusión de la cinta.

No obstante, Pániker, que admitió que Sampedro tenía la voluntad de que el vídeo se exhiiese, manifestó que a él, como presidente de la asociación DMD, le hubiera gustado que se mostrase junto a otras cintas testimoniales de otras eutanasias.

"Me hubiera gustado que se exhibiese, por ejemplo, junto a la cinta de un enfermo holandés que murió, practicándosele la eutanasia, rodeado de su familia, con afecto, con cuidados médicos y sin dolor", dijo. "Se vería la brutal diferencia entre esa muerte y la de Sampedro".

Para Pániker, frente a la cinta holandesa, la del tetrapléjico gallego indigna" por el hecho de que un hombre "tan civilizado" como Sampedro tuviese que morir de una manera "tan solitaria, clandestinamente y con dolor".