SALVADOR VILARRASA AFIRMA A SU LLEGADA A VALENCIA QUE VOLVERA A TRABAJAR EN GUINEA

VALENCIA
SERVIMEDIA

El empresario valenciano Salvador Vilarrasa, condenado en Guinea junto con Santiago Hana a doce años de prisión e indultado posteriormente, llegó a primera hora de la tarde a Valencia, tras permanecer detenido 38 días en Bata.Nada más llegar al aeropuerto de Manises afirmó que piensa volver a trabajar en Guinea.

En Manises estaban esperándole su esposa, Lila Albanozzo, y el resto de su familia, que durante los dos últimos meses han realizado intensas gestiones para conseguir la definitiva liberación del empresario.

En medio de una nube de periodistas y fotógrafos, Vilarrasa dijo qe llegó a estar muy nervioso poco después de ser detenido porque "creía que no íbamos a poder salir de allí". El empresario valenciano, que fue detenido el 26 de octubre pasado, permaneció desde entonces en un antiguo cuartel de la Guardia Civil en Bata que carece de agua corriente.

Sin embargo ahora ve las cosas de otra forma. "Ha sido una experiencia muy negativa en algunos aspectos y positiva en otros, porque he podido ver cosas que no conocía".

Vilarrasa, que apareció sonriente y con buen aspcto, fue abrazado por su esposa y sus familiares más directos. Lila Albanozzo dijo a los periodistas que para ellos "las Navidades empiezan hoy y van a ser muy largas".

El empresario valenciano y Santiago Hanna, español de origen libanés han estado cerca de dos meses sin poder salir de Guinea, primero por estar detenidos y después porque las autoridades de este país africano no les permitían cruzar la frontera. Ambos fueron acusados como supuestos "golpistas" por un delito contra la seguridad exteriordel Estado guineano.

El fiscal militar solicitó para ellos 30 años de reclusión mayor y 100 millones de pesetas de multa, pero finalmente se les sentenció en consejo de guerra a 12 años de prisión y multa de 60 millones.

Las presiones del gobierno español, que denunció la falta de garantías del proceso y amenazó con suspender la ayuda humanitaria a Guinea, consiguieron finalmente que el presidente Teodoro Obiang indultara a los dos empresarios españoles.

Vilarrasa y Hanna se libraron así de umplir condena en la cárcel, pero les quedaba una multa que se rebajó a 40 millones de pesetas y luego fue recurrida por los abogados de los industriales. Por este motivo, Hanna tuvo dificultades inicialmente para salir del país, a pesar de que tenía el visado en regla, pero posteriormente las autoridades guineanas le pidieron disculpas y el empresario español pudo viajar a Canarias.

Vilarrasa, que tenía el visado caducado, esperó a que su colega hubiera podido salir sin problemas del país para pedir l la renovación del visado y, finalmente, ayer salió de Guinea por carretera en dirección a la capital del vecino Gabón, Libreville, desde donde tomó un avión que esta madrugada le llevó a París.

(SERVIMEDIA)
23 Dic 1992
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