En el Pleno del Senado, la ministra indicó que "vamos a hacer que las medidas de verdad demuestren toda su eficacia", además de apuntar que el verdadero problema de la economía española es la necesidad de un cambio de modelo.

En este sentido, subrayó que el Gobierno "desde hace ya tiempo" ha venido "haciendo esfuerzos" en los sectores que más podían contribuir al cambio de modelo.

"Este esfuerzo antes era compatible con el superávit de las cuentas públicas; ahora no estamos en esa situación aunque creemos que bien merece la pena el esfuerzo porque eso es lo que tiene que hacer un Gobierno responsable".

La ministra reconoció que "queda mucho hacer" para alcanzar un modelo de crecimiento más sostenible.

La vicepresidente afirmó que la crisis económica en España responde a la coyuntura global, y que su situación es "similar al resto de países desarrollados".

En todo caso, "este Gobierno nunca puede estar contento con las tasas de paro" que se registran, por lo que seguirán trabajando para dar a la crisis una "respuesta económica y social, fortaleciendo todos los instrumentos de protección" que contarán "siempre con un impulso del diálogo social".