El salario social ha costado en doce meses 2.12 millones ---------------------------------------------------------

MADRID
SERVIMEDIA

El Ingreso Madrileño de Integración (IMI), en su primer año de funcionamiento, "está garantizando ayudas a 8.065 familias, lo que supone que se benefician 25.974 personas, mediante la redistribución de 2.102 millones de pesetas al sector de población más desfavorecido social, cultural y económicamente de la Comunidad Autónma de Madrid (CAM)", según consta en un documento de la Consejería de Integración Social.

El informe, al que tuvo acceso Servimedia, hace balance del citado programa, desde el 1 de octubre de 1990 al 31 del mismo mes de 1991, y especifica que el IMI está a la cabeza de los proyectos de rentas mínimas de inserción de las comunidades autónomas.

Durante los primeros doce meses de aplicación, el IMI ha abordado, sobre todo, al sector denominado "nueva pobreza", integrado por mujeres con cargas familires no compartidas y que suponen el 48,16 por ciento de las incorporaciones.

Otro de los sectores a los que va destinado el programa es el de los menores. Los 12.202 que se han beneficiado hasta ahora del IMI proceden de núcleos familiares desestructurados, con lo que "han mejorado su calidad de vida en áreas tan dispares como la de cubrir niveles básicos de alimentación y vestido, así como la garantía de escolarización".

Para los técnicos de Integración Social, el IMI tiene una gran importancia omo elemento de prevención con grupos de población en situación de pobreza económica y todavía no asociados a procesos graves de exclusión.

Otro de los datos que el informe aporta es que "se confirma la no existencia de pobreza económica en la zona rural". La gran mayoría de las solicitudes son de vecinos de la capital (71,3 por ciento). Del resto, sólo cinco incorporaciones provienen de la Mancomunidad de Sierra Norte, la denominada "Sierra Pobre", que aglutina a 42 pueblos.

Con la aplicación de IMI, un buen número de familias (el 49% del total de las solicitantes) accedieron por primera vez a los servicios sociales comunitarios; un hecho que, según la CAM, es beneficioso, "porque inician un proceso de integración que les permite ser ciudadanos de pleno derecho".

De las más de 8.000 familias que reciben el IMI, el 31,3% eran solicitantes en paro. Precisamente, el 24,4% de las actividades que se han desarrollado dentro del programa IMI han ido dirigidas a la búsqueda de empleo y capacitación ara el acceso al trabajo.

Un dato significativo de la experiencia de un año de IMI es el altísimo índice de analfabetismo entre los demandantes de esta ayuda. El 19,95% son analfabetos totales y un 30,18% carece de estudios primarios.

Para este sector fueron destinadas el 18% de las actividades culturales y, entre ellas, la alfabetización ocupó el 30% del total.

En el futuro, Integración Social medirá la eficacia y el éxito del programa por el número de "deserciones" o personas que dejan el MI.

Hasta la fecha, las exclusiones se sitúan en un 11 por ciento sobre el total de incorporaciones, de las que un 43,97% fueron por haber superado el baremo de recursos económicos y un 36,89% por incumplimiento de contrato.

(SERVIMEDIA)
03 Dic 1991
SMO