"Cataluña y España viven uno de los momentos más delicadosde la democracia", advirtió Sáenz de Santamaría en una rueda de prensa en la sede del PP, "y era absolutamente innecesario y contraproducente en un país del siglo XXI haber llegado a esta coyuntura, que no es buena para nadie".

Insistió en que es el propio Zapatero quien ha "organizado este lío mayúsculo" al impulsar el Estatuto con la reunión que mantuvo con el presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, y el líder de CiU, Artur Mas, una semana antes de que se cerrara el acuerdo.

Ahora el Parlamento catalán llevará al Congreso un texto que "rompe abiertamente con la Constitución y el modelo de convivencia" de los españoles, plantea la "ruptura del principio de igualdad de los españoles, el derecho a decidir todos juntos lo que los afecta a todos".

"Lo que busta el Estatuto es que los poderes públicos de Cataluña decidan los asuntos que afectan a Cataluña pero también codecidan los asuntos que nos afectan a todos", recalcó, con lo que "modifica de arriba a abajo la Constitución".

CAMBIO DE LA CONSTITUCION Reiteró que si eso es lo que el presidente del Gobierno pretendía, debería haberlo llevado en el programa electoral, y haber planteado una reforma de la Constitución, pero con los cauces establecidos para ello, y no sin "consultar" al principal partido de la oposición.

Por otra parte, la dirigente del PP subrayó que, al remarcar la "indisoluble unidad de la nación española tras la aprobación del Estatuto catalán, el Rey "ha reflejado una preocupación de todos los españoles".

Sáenz de Santamaría aseguró que comparte las palabras de don Juan Carlos, que "avala la Constitución de 1978" y que el monarca pronunció en su papel de "árbitro y moderador" que le otorga la propia Carta Magna.