Si bien no se quiso pronunciar explícitamente sobre el contenido de la campaña, Sáenz insistió en que "cualquiera tiene derecho a hacer la campaña que estime más conveniente para trasladar a la opinión pública una determinada postura".

En defensa de las convicciones "se hacen campañas de todo tipo", dijo, "y no seré yo quien la vaya a criticar. La Iglesia está en su derecho de trasladar a los ciudadanos el mensaje que estime conveniente".

Dicho esto, explicó que el PP "no está de acuerdo con la reforma", porque transmite la idea de que al aborto es un método conceptivo más y porque rechaza la posibilidad de que las menores de entre 16 y 18 años puedan abortar sin autorización paterna.

Cuando se abre un debate de esta naturaleza "frívolamente" y sin tratar de llegar a un consenso con otras fuerzas políticas se acaba "dividiendo a la sociedad" y proponiendo "un sinsentido" como el que afecta a las menores.