El informe de AI documenta torturasen comisarías; malos tratos en prisiones, donde los reclusos se encuentran hacinados y las enfermedades están muy extendidas; violencia contra las minorías étnicas y religiosas y contra extranjeros por motivos racistas; secuestros, desapariciones y torturas, incluidas violaciones.

Según los datos de la organización, casi un millón de personas están detenidas en cárceles rusas, de las que más de la mitad están enfermas, 300.000 padecen trastornos psíquicos, 92.000 tuberculosis, más de 33.000 sida, 30.00 sífilis y más de 200.000 esperan sentencia retenidas en "cárceles infierno".

Asimismo, asegura que 40.000 mujeres y niños viven refugiados en "colonias penitenciarias", muchas veces a miles de kilómetros de sus familiares; que 14.000 mujeres mueren cada año por violencia de género; que más de 17.000 niños cumplen condena en celdas sucias, mal ventiladas y plagadas de bichos, y que en el territorio de la ex URSS más de 50.000 menores son víctimas de esclavitud.

En uno de los casos que AI documena se cuenta cómo Marina T. fue violada y torturada por cuatro hombres después de haber sido detenida por la policía acusada de conducir en estado de embriaguez. Dos de los agentes fueron inhabilitados y otro de ellos, pese a que fue declarado culpable, fue puesto inmediatamente en libertad en virtud de una amnistía.

Amnistía exige al Gobierno ruso que se proteja a los civiles de las "operaciones de seguridad" en Chechenia, la aprobación de una ley por la cual se tipifique como delito la violencia domética, la salvaguarda de los derechos de los menores, la creación de un órgano independiente encargado de investigar las torturas, y la supresión de todos los elementos del sistema de expedición de pasaportes e inscripción en registros que sirven de base para la discriminación sistemática de minorías étnicas y religiosas.

CHECHENIA

Según el informe de la organización, Chechenia es uno de los lugares donde se producen un mayor número de violaciones de los derechos humanos, con desapariciones, ejecucioes extrajudiciales, actos de tortura por parte del Ejército ruso, secuestros y exterminio de soldados rusos por parte de los guerrilleros chechenos.

El director de AI en España, Esteban Beltrán, aseguró que en los dos últimos años y medio, al menos 300.000 chechenos han huido de sus hogares, miles de civiles ha sido detenidos y un número significativo de ellos han sido maltratados. Asimismo, han desaparecido decenas de personas y sólo entre diciembre de 1999 y febrero del 2000 hubo tres masacres, con a muerte de 112 personas.

Por otro lado, Beltrán anunció que miembros de AI y de Cruz Roja están investigando las denuncias y testimonios de ejecuciones sumarias en la operación antiterrorista en el teatro Dubrovka de Moscú, que se saldó con la muerte de la mayoría de los secuestradores y de más de 115 rehenes, y exigió una "investigación independiente e imparcial" que aclare lo sucedido y cuyos resultados sean dados a conocer públicamente.

A su juicio, en la resolución del secuestro se violaron erechos humanos y la "falta de transparencia" del Ejecutivo ruso en este caso "prueba que algo hay que ocultar".