Según publica hoy el diario `El País', antes de abandonar e Ministerio de Asuntos Exteriores para trasladarse a la Secretaría General de la OTAN, Javier Solana ha pedido el placet al Gobierno mejicano para nombrar a Dicenta embajador español.

Rupérez considera a Dicenta un "pésimo funcionario, de conocidas y manifiestas voluntades sectarias". "Desde luego, es de una gravísima irresponsabilidad que, en tiempos preelectorales, el Gobierno socialista se dedique a situar a sus fieles en sitios que tienen, claramente, una importancia política significativa", afirm.

Insistió a este respecto en que el Gobierno mejicano no dé el placet porque José Luis Dicenta "no contaría nunca con la confianza de un Gobierno del PP". "Esto debería ser motivo de reflexión para un Gobierno socialista terminal y para llamar la atención a la opinión pública sobre estos intentos de colocación de amigos en esta última hora, que son realmente obscenos".

Por contra, el portavoz de Exteriores del PP calificó de "buen funcionario" al recién nombrado ministro de Asuntos Exteriores, Crlos Westendorp. "Es el que mejor, en estos momentos, puede asegurar la interinidad del Ministerio de Asuntos Exteriores", añadió.