RUMANOS. MAYOR OREJA RECONOCE QUE EL DESALOJO DE LOS RUMANOS DE "MALMA" NO FUE UNA SOLUCION ACERTADA

SANTANDER
SERVIMEDIA

El ministro de Interior, Jaime Mayor Oreja, reconoció hoy en Santander que las autoridades madrileñas, a pesar de que tomaron una decisión "llena de sentido común" cuando decidieron desalojar a los rumanos del poblado madrileño de "Malmea", no consiguieron un resultado "satisfactorio", por lo que hay que tomar nuevas soluciones.

Mayor Oreja participó oy en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo en un curso sobre drogadición. Durante la rueda de prensa que ofreció, se refirió a la cuestión de los rumanos desalojados en Madrid y también a los últimos brotes de racismo, si bien quiso precisar que "se trata de cuestiones absolutamente diferentes".

Sobre el asunto de los rumanos, aseguró que, una vez comprobado que la solución no fue la ideal, se trata ahora de dar una respuesta "concreta" a su situación y buscarles un lugar apropiado para vivir. "En política, a veces no se acierta del todo y, a veces, por razones comprensibles, se adoptan medidas que luego se ve que no es la decisión correcta", y hay que rectificar, reconoció ante los periodistas.

Mayor Oreja tiene previsto reunirse a última hora de la tarde de hoy con representantes de la Comunidad de Madrid y del Ayuntamiento para intentar encontrar una solución. Además, el ministro comparecerá en breve en el Congreso de los Diputados, para explicar las actuaciones del Ejecutivo en est sentido.

INMIGRACION

El ministro del Interior se refirió también a los últimos casos de racismo y xenofobia que se han producido en la localidad barcelonesa de Tarrasa, y dijo que deben ser condenados "sin duda ni vacilación".

No obstante, Mayor Oreja recordó que se trata de episodios aislados que no hay que exagerar ni generalizar, por lo que pidió que no se abra un debate para dividir la sociedad entre quienes se pueden o no considerar racistas.

"No podemos dividir a la sociedad español en dos bandos", dijo, para puntualizar que "la inmigración no puede ni debe ser un banderín de enganche para la derecha o para la izquierda", ni tampoco debe separarse a las personas en progresistas o no progresistas por estas cuestiones.

Aseguró que el problema de la inmigración no es algo que pueda solucionarse con una ley más o menos amplia y aseguró que se trata más de un esfuerzo de concienciación colectiva.

(SERVIMEDIA)
19 Jul 1999
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