Rubio, que actualmente pasa unas vacaciones en Mallorca, asegura que no entiende que se le ponga como ejemplo de la "cultura del pelotazo" cuando "gran parte de los problemas que tenido no los hubiera padecido si no hubiera sido precisamene el que más ha luchado contra la cultura del pelotazo".

Asimismo, reitera que no cometió ningún abuso cuando actuó como gobernador del Banco de España y que todo lo que puede achacársele es un delito fiscal ya presrito.

El ex gobernador califica de "anómala" la nueva decisión de la titular del juzgado número 21 de Madrid, que investiga el "caso Ibercorp", de ordenar la apertura de juicio contra él y otras 10 personas por ocho presuntos delitos, entre ellos de cohecho, estafa y tráfico de influencias.

A este respecto, asegura que las nuevas investigaciones abiertas sobre él son jurídicamente "una cosa tan anómala que tiene que tener otras explicaciones" e insiste también en que "soy el primer interesado en ue se demuestre que no tengo ni cuenta en Suiza ni en ningún otro país, ni la he tenido nunca".

Rubio lamenta el daño que haya podido causar con sus irregularidades fiscales al ex ministro de Economía Carlos Solchaga y al presidente del Gobierno, pero recalca que no ha traicionado a Felipe González.

"Pero también creo", precisa, "que el tratamiento que han dado al problema les ha perjudicado. Si el tratamiento que se hubiera dado se hubiera reducido al tema fiscal, que es lo que era, hubiera sidomucho menor, y mucho menor si desde los propios poderes públicos no se hace todo lo necesario para montar un sistema para que termine en la prisión preventiva".