Rubiales señaló que "una vez que se despeje la incógnita de las elecciones generales, se va a permitir que en Andalucía se gobierne", tras reconocer que las elecciones autonómicas deberían haberse evitado a través de un mayor esfuerzo del PSOE e IU para garantizar el acuerdo.

La delegada del Gobierno en Andalucía aseguró, asimismo, que no se planteó acudir a la cena-homenaje del ex ministro del Interior Jsé Barrionuevo, ya que "el tema del suplicatorio es algo absolutamente personal e íntimo y resulta muy difícil hacer una valoración de carácter general". Añadió que la solidaridad con Barrionuevo "se puede mostrar de muchas maneras, y no tiene por qué ser ésa necesariamente".

Rubiales, que abogó por celebrar las elecciones generales y las autonómicas de forma conjunta, reivindicó la política de consenso de la transición para que el partido más votado pueda gobernar a partir de marzo en Andalucía. En ete sentido, lamentó que los alcaldes del PP hayan intentado hacer una "guerra del agua" a costa de las desaladoras, ya que "no podemos echarnos éstas a la cabeza porque unos sean de un partido y otros de otro".

La delegada del Gobierno afirmó que todavía no ha decidido si figurará en las listas de las elecciones generales, aunque matizó que no le importaría volver a dar clases en la universidad.