Rubalcaba, que hizo esta afirmación ante la Comisión de Interior del Congreso, donde acudió para explicar los datos de delincuencia de 2008, sostuvo que "a todo ministro del Interior lo que más le gusta es tener una Policía satisfecha y bien retribuida", al tiempo que añadió que su departamento ha hecho un esfuerzo en este sentido.

"Nada me gustaría que tener un margen, pero tengo el que tengo y tenemos el que tenemos", aseguró el titular de Interior, quien no obstante manifestó su "voluntad negociadora" y anunció que piensa reunirse en breve con los sindicatos policiales.

Añadió que en su departamento hay "voluntad de diálogo" con los representantes de los policías, con los que espera llegar a un acuerdo, "aunque sea a medio plazo".

Por su parte, el portavoz socialista, Antonio Hernando, dijo que los policías se merecen que se les siga subiendo el sueldo, pero reprochó a los sindicatos de este cuerpo de seguridad que no imiten a UGT y CCOO.

Según Hernando, estas dos centrales sindicales "están siendo absolutamente corresponsables con una situación difícil que hay en este país" y "no están convocando manifestaciones ni huelgas".

Por su parte, el portavoz del PP, Ignacio Cosidó, defendió la subida salarial de los policías y afirmó que los agentes "no pueden ser las principales víctimas de la incompetencia económica del Gobierno".

A su vez, Rosa Díez, de UPyD, pidió que se atiendan las demandas salariales de los policías nacionales, con quienes existe una "deuda" que debería ser saldada, ya que se ha saldado la "deuda histórica" que planteaban determinadas comunidades autónomas.