La comparecencia de Rubalcaba surgió del compromiso adquirido por el Ejecutivo en el comunicado que hizo público el pasado día 7, en el que calificaba de "conjunt de falsedades" las informaciones publicadas sobre el denominado "caso Palomino" y, en concreto, sobre la presunta adjudicación "a dedo" de las obras de electrificación del búnker de La Moncloa a CAE, empresa en la que trabajaba como directivo el cuñado de Felipe González.

En uno de los puntos de la mencionada nota, el Gobierno anunció que había solicitado su comparecencia en la Comisión de Secretos Oficiales del Congreso, con el fin de "suministrar toda la información de que se dispone en relación co las obras de La Moncloa denominadas 'Proyecto CITA'".

La convocatoria de esta sesión secreta ha estado rodeada de polémica, ya que el portavoz del PSOE en la Cámara Baja, Joaquín Almunia, acusó a los populares de querer demorar la celebración de la comisión para mantener un clima de sospecha respecto a la actuación del Gobierno en sus relaciones con la empresa CAE.

Por su parte, el portavoz del PP en el Congreso, Rodrigo Rato, rechazó estas acusaciones y aludió problemas de agenda y a un viaje aWashington para participar en la asamblea de la ONU, con el fin de dejar claro que ésas fueron las únicas razones que le impedían participar en la reunión.

La Comisión de Secretos Oficiales, encargada de abordar materias clasificadas o secretas, está compuesta por los portavoces parlamentarios de todos los grupos políticos, a excepción del Mixto.