Rubalcaba y Alonso llevaron a cabo esta defensa del carácter militar de la Benemérita durante el acto formal de toma posesión del nuevo responsable del cuerpo, Joan Mesquida, que tuvo lugar en el cuartel central de la Benemérita, en Madrid.

En este sentido, durante su discurso, el ministro del Interior se refirió a que "nada sustancial, nada sustantivo" va a cambiar con el relevo de Mesquida, que sustituirá en el cargo al teniente general del Ejército Carlos Gómez Arruche.

A este respecto, Rubalcaba señaló que "la Guardia Civil seguirá desempeñando su papel decisivo para proporcionar seguridad a los ciudadanos y lo hará en el mismo esquema de inserción institucional con el viene operando".

CONTACTO CON LOS MANDOS

Tras el relevo de Gómez Arruche se va a mantener una política de continuidad en la benemérita, según Rubalcaba, si bien matizó que el cambio de director servirá para introducir algunas mejoras en el Instituto Armado, que, en todo caso, se harán "manteniendo su naturaleza militar".

Estas modificaciones, señaló el ministro, tendrán que ver, en primer lugar, con la pretensión de "adecuar cabalmente sus normas internas de funcionamiento y disciplina a nuestra Constitución". A esto se sumará el objetivo de "oxigenar los mecanismos de interlocución" de la Benemérita, para que los guardias puedan trasladar sus inquietudes a los mandos.

Por su parte, Alonso dijo en su intervención que los responsables de Interior y Defensa están de acuerdo, ya que es la posición del Gobierno, en que "la Guardia Civil va a seguir ocupando la posición institucional y disfrutando de la naturaleza que tiene legalmente conferida".

Esto supone, indicó, que la Benemérita "es y va a seguir siendo un instituto de naturaleza militar", lo que no impedirá que se mejoren sus "capacidades", algo que redundará en el servicio que presta la institución.

A este respecto, aludió a que "el Gobierno está preparando las reformas del régimen disciplinario", lo cual servirá para que este cuerpo sea "más moderno" y pueda desempeñar mejor "las indudables funciones de naturaleza policial" que realiza.

Alonso y Rubalcaba pronunciaron sus discursos en un acto en el que se encontraba presente toda la cúpula militar y policial.En este sentido, asistieron a la toma de posesión de Joan Mesquida el Jefe del Estado Mayor de la Defensa, Félix Sanz Roldán, el director general de la Policía, Víctor García, o el delegado del Gobierno en Madrid, Constantino Méndez.