Santos Ganuza, natural de Artajona, lleva más de 25 años en Ruanda y actualmente se encuentra en Rukare, población por la que ayer pasó un convoy de ayuda humanitaria al que no quiso subir. Su congregación todavía no ha decidido ordenarle que vuelva.

Porsu parte, María Antonia Villanueva sigue en la localidad de Ruasa y, según la Oficina de Información Diplomática española, su intención es permanecer allí, por lo que ha solicitado a un grupo de "cascos azules" que vaya a visitarla.

Mientras tanto, cuatro dominicas navarras de Bureje, Ana María Sainz, Rosario Yoldi, Ignacia Erro y Juana María Tirapu, están a la espera de ser rescatadas por un convoy francés, según fuentes oficiales. El resto de los religiosos procedentes de la Comunidad Foral están caino de su tierra o han llegado ya a ella.