Así lo indicó Rovira durante su intervención en el Consell Nacional de ERC, en el que pudo participar de forma presencial tras regresar hoy a Cataluña tras casi siete años en Suiza, donde comentó que llega el momento de “volver a liderar y articular” todo este “espacio soberanista” a favor del referéndum.

“Si podemos generar pasos adelante para tener más soberanía, creo que lo tenemos que valorar muy muy bien, veremos si después son pasos de soberanía, pero creo que esto haría que estuviéramos mucho mejor preparados para el día que podamos dar un nuevo paso hacia la república catalana”, añadió.

“El país”, incidió, “necesita dar pasos claros de soberanía”. “Hicimos el referéndum de 2017, lo intentamos mantener, seguramente no estábamos preparados para lo que vino después, que fue la ofensiva del Estado y una falta de reconocimiento internacional y nos quedamos allí. Tenemos que superar esta etapa”, expuso.

Además, apostó por “reconstruir la mayoría social” y, a poder ser en las próximas elecciones, también “mayoría política a favor de la independencia de nuestro país” y “creo que nosotros tenemos que liderar la articulación de este espacio tan central y tan mayoritario que hay en Cataluña a favor de un referéndum, de unas urnas”.

SITUACIÓN DE ERC

Regresa, especificó, con ganas de entender “por qué” ERC tiene “malos resultados” electorales, qué piensa “el país” de su partido y por qué no le dio “su confianza”. También señaló que quiere entender los resultados de este nuevo ciclo político y por qué “no tenemos una mayoría independentista en el Parlament de Cataluña”.

Explicó que “estamos negociando con el Gobierno español en el marco de una resolución de un conflicto político y nosotros hemos puesto sobre la mesa” cómo lo quieren resolver, y es con un referéndum de autodeterminación en el que “caben todos”, pero, por el otro lado, “no hemos recibido ninguna opción para resolver el conflicto político”.

Centrándose en su partido, destacó que “alguna cosa tenemos que cambiar”, pero aseguró que ERC no tiene una “crisis”, sino “un debate” que se hará con “madurez política”. “En este partido no habrá una crisis si nosotros no queremos”, arguyó Rovira, añadiendo que toca tener “las prioridades claras”.

Pidió a los miembros de este partido que si ven actitudes de “autocrítica constructiva” le pongan “fin” y les instó a hablar “mucho” de “cosas que se dicen”. Dejó claro que su papel es ser “útil” hasta que se celebre el Congreso Nacional el 30 de noviembre, pero repitió que ella no será “candidata de nada” y “menos contra Oriol Junqueras”.

VIAJE DE VUELTA

Señaló que este ha sido el viaje “más maravilloso” de su vida en el que ha saboreado “cada minuto que ha pasado”. Hoy, expresó, siente que vuelve a “renacer”, aunque apuntó que para ella el “exilio” ha sido una “aventura de crecimiento personal” y de “oportunidad política”, de encontrar “aliados” para continuar con el “camino hacia la independencia”.

En este sentido, subrayó que políticamente ha aprovechado todas las “oportunidades” que el “exilio” le ha brindado en una ciudad “maravillosa” como es Ginebra, donde “se hace política”, donde hay “muchos exiliados”. “Me siento fuerte, me tenéis aquí para la utilidad de este proyecto”, concluyó.

Rovira fue recibida entre aplausos y gritos de “independencia” de los asistentes a este Consell Nacional de ERC. Allí fue recibida por el presidente del Gobierno catalán en funciones, Pere Aragonès, con quien se fundió con un abrazo, igual que hizo con el diputado Ruben Wagensberg, quien se acercó a saludar, pero tuvo que marcharse.