Los magistrados consideran que en la actuación del juez instructor Joaquín Aguirre no existen indicios delictivos y añaden que el escrito acusatorio de Misol itenta explicar "el retraso (de la causa) en un inverosímil temor del juez de aparecer como fracasado ante la opinión pública".

El TSJC afirma que "es notorio que el juez trabaja activamente en la instrucción de las diligencias" del caso y que tienen "una complejidad poco común".

Según los magistrados del tribunal, "pretender que una demora de escasa trscendencia convierta a un juez en delincuente supone desconocer el principio de intervención mínima".

Sobre las supuestas revelaciones de secrto del sumario a las que aludía en su querella Mercedes Misol, el tribunal indica que las fuentes de información aparecidas en los recortes de prensa aportados por la denunciante no aluden ni al juez ni al fiscal.

El TSJC destaca que algunas de estas informaciones son "meras especulaciones periodísticas", mientras que en otras no puede sentirse ofendida, porque "ninguna de ellas afecta a secretos que no deban ser diligencias".

Tras el rechazo del tribunal para admitir a trámite la querella, Mercees Misol puede ahora presentar un recurso de súplica ante el mismo TSJC contra la resolución hecha pública hoy.