En una carta que hoy publica "El País", Rubio, que en aquella época era gobernador del Banco de España, califica de "error" la información facilitada por Pujol.

"Desde que la inspección del Banco de España descubrió lo ocurrido en la Banca Garrga Nogués, los que dirigiamos en aquellos momentos la institución hicimos todo lo que estuvo en nuestras manos para evitar que el señor De la Rosa controlara cualquier entidad bancaria", indica.

Rubio agrega que el Banco de España llegó incluso a sugerir al presidente de KIO en 1987 que apartara a Javier de la Rosa de sus inversiones bancarias en España e informó también al Gobierno de su opinión.

"Tampoco es cierto que el Banco de España viera con buenos ojos la operación llevada a cabo con el Cnsorcio Nacional del Leasing", agrega, "aunque careciera de medios legales para impedirla".

Mariano Rubio concluye afirmando que "desde la crisis de la Banca Garriga Nogués, la desconfianza del Banco de España hacia las actividades empresariales del señor De la Rosa no ofrece ninguna duda".

CARMEN POSADAS QUIERE PERDERSE

Por otro lado, la esposa de Mariano Rubio, Carmen Posadas, declara en una entrevista que hoy publica "Lecturas" que su ilusión es "perderse" junto a su marido "al lado del mar" La escritora aspira a "una vida perdida y alejada del mundanal ruido. Y de vez en cuando acudir a Madrid o a Londres en plan un poco frívolo".

Según Carmen Posadas, lo ocurrido durante los últimos meses, con la detención y encarcelamiento de Mariano Rubio, ha unido mucho al matrimonio. "Nos llevamos muy bien y es difícil separarnos", asegura, por lo que no se explica que cada poco tiempo surjan rumores sobre una supuesta separación.