En declaraciones a Onda Cero Radio, Rosa Conde afirmó que España tiene que avazar en el proceso de cambio que se inició en 1982, "pero de forma muy clara en el 89", y para ello el Gobierno, dijo, necesita 1993 como año de trabajo.

"Nosotros nos vamos a dedicar a trabajar", añadió, "y no nos vamos a dedicar a entrar en una confrontación sistemática con el Partido Popular (PP)".

La ministra reconoció las dificultades del año que termina. "Las dificultades económicas, los elementos de irregularidades, de corrupción, esta imagen que ha estado flotando a lo largo del año, afect fundamentalmente al Gobierno", dijo.

"Pero la obligación de todos", advirtió, "resaltando los errores y las dificultades, es volver a hacer que los ciudadanos confíen no sólo en sus políticos sino en sus instituciones".

Según Rosa Conde, el Gobierno ha perdido parte de la imagen positiva que tenía y debe recuperarla. "Esa es nuestra obligación y yo espero, de verdad, que nos ayuden los medios de comunicación (...) porque éstos tienen capacidad de crear esa magia, la que se creó en la transición,aunque también tienen capacidad de crear momentos oscuros".

En opinión de la ministra Portavoz, diez años de gobierno "desgastan y hacen, incluso, que habiendo muchos elementos positivos dentro de la acción del gobierno, éstos no se vean por los ciudadanos y sólo aparezcan los negativos. Pero, si somos honestos, el balance del año es bueno".

Respecto a la corrupcion, Rosa Conde manifestó que "la situación no es tan grave desde el punto de vista cuantitativo; puede ser grave desde el punto de vist simbólico. Sin una solución judicial", agregó, "una solución política no es válida y honestamente creo que se ha actuado bien, teniendo en cuenta la lentitud de la justicia española".