Tras recordar que en la etapa anterior "había calado en una parte del electorado que IU actuaba contra el Partido Socialista y, por lo tano, contra una fuerza de izquierdas", manifestó que "al llegar el Partido Popular al Gobierno y plantear IU una oposición rotunda ha situado en la práctica de una parte muy importante del electorado progresista y de izquierdas que IU es una fuerza coherente".

Romero afirmó que esa oposición "se inició en el debate de investidura, en el que Julio Anguita anunció una oposición de izquierdas sin ningún tipo de concesiones al Gobierno de la derecha de José María Aznar, a las privatizaciones, al ataque al etado de bienestar y a la integración militar en la OTAN".

En opinión del dirigente andaluz, IU era coherente "cuando criticaba la política del felipismos en la etapa anterior y lo es ahora cuando critica la política de Aznar desde el punto de vista de una coherencia de izquierdas".

"Cuando además se habla de que es necesario articular una gran plataforma con los sindicatos, con los colectivos culturales de la izquierda y se establecen contactos con el Partido Socialista para ver en qué puntos hayacuerdo y en qué puntos hay desacuerdo", dijo Romero, " todo ello es una pedagogía que va calando en el electorado progresista".

"Está clarísimo", continuó Romero, "que esa situación política nueva que se ha abierto en España hace de Izquierda Unida una fuerza ética contra la corrupción, una fuerza que actúa de manera clara contra el terrorismo de Estado, pero al mismo tiempo una fuerza que plantea su oposición a la política neoliberal, la haga quien la haga, y que está dispuesta a llegar a acuerdos cncretos con otras fuerzas de izquierda y de progreso, tanto sociales como políticas".

"Yo creo", concluyó el dirigente de IU, "que es una línea que irá dando sus frutos, que ya empieza a darlos, que es muy pedagógica y que se sitúa siempre en el terreno de los hechos y no de las palabras. La gente habrá visto que en esta etapa, con la derecha en el Gobierno, la oposición más clara es la de Izquierda Unida, desde un punto de vista de izquierdas, y eso nos va dando dividendos que yo creo que se van a trducir en un aumento de la afiliación, como ya estamos notando en Andalucía, y también en una perspectiva de recuperación electoral para situarnos como una fuerza clara con vocación de gobierno".