Según Romero, el presidente del Gobierno es consciente del rechazo del ex magistrado al indulto, motivo por el cual se decidió finalmente por Juan Alberto Belloch, quien está demostrando "mayores tragaderas y mayor sintonía con el 'felipismo' que Baltasar Garzón".

El parlamentario de IU recordó que la intención de González al incorporar a Garzón en la lista electoral del PSOE era la de "instrumentalzar a una persona con un prestigio extraordinario" por su actuación como magistrado, en un momento en que había que frenar la "hemorragia de votos" que se presumía iban a sufrir los socialistas.

A su juicio, lo extraño del caso fue que Garzón fuese situado en el "número dos" de la candidatura por Madrid, un puesto de gran relevancia política, y que luego no se contará con el juez para ningún cargo importante.

Romero explicó que el magistrado fue "rodando" de despacho en despacho, desde el Ministeio de Asuntos Sociales al de Interior, donde Corcuera incluso le negó la posibilidad de que tuviera mando policial.

"El (Garzón) empezó a comprobar que fue utilizado por un hombre sin escrúpulos como Felipe González y fue muy ingenuo al pensar que desde el poder, y con unas ideas progresistas y avanzadas, se podía luchar mejor contra la corrupción".

Igualmente, Romero consideró que los abucheos recibidos recientemente por Garzón en la plaza de toros de Valencia afectaron mucho al magistrado, porqe se dio cuenta de que todavía no había hecho gestos suficientes para desmarcarse del "felipismo".