A su juicio, no se puede "castigar" a quienes pelean por la democracia y la libertad, dijo en referencia a los dos dirigentes socialistas vascos.

Los dos dirigentes del Partido Socialista de Euskadi tendrán que declarar ante los tribunales, al igual que el lehendakari, Juan José Ibarretxe, por haber mantenido reuniones con representantes de la ilegalizada Batasuna.

En un encuentro informativo celebrado en el Senado, Rojo insistió en que no hay inquietud entre los socialistas vascos, "porque lo que se hizo fue para arreglar las cosas, no para estropearlas".

Insistió en que desde el PSE "estamos peleando por la democracia y la libertad y no creo que a nadie se le pueda castigar por eso".

MENSAJES A BATASUNA

Rojo recordó que en esa entrevista los dirigentes socialistas transmitieron a los dirigentes de Batasuna tres mensajes claros: les instaron a dejar de ser el problema y formar parte de la solución, les pidieron que se ajustaran a los mismos derechos y deberes que el resto de la formaciones políticas y les advirtieron de que no aceptarían ningún chantaje político de ETA.

En consecuencia, el presidente de los socialista alaveses no ve nada reprobable en la actitud de sus compañeros de partido, que se limitaron a "cantar las verdades del barquero" a Otegi y sus compañeros, por lo que espera que este problema "se solucione de forma serena y tranquila".

En cuanto al horizonte electoral en el País Vasco, Rojo se manifestó esperanzado de que haya un relevo en el Gobierno vasco, que será en todo caso "un cambio con sonrisa, sereno y no agrio".

El objetivo de los socialistas, dijo, será "eliminar barreras" y aun reconociendo la pluralidad de opiniones de la sociedad vasca, buscar un espacio común de convivencia.

Sobre unas recientes declaraciones del presidente del PSE, Jesús Eguiguren, en las que insinuaba que debería haber puentes de comunicación abiertos con el mundo abertzale, Rojo aseguró que el dirigente guipuzcoano opina, al igual que él, que en este momento "no tiene sentido" ni se dan las "condiciones" para dicutir nada con el mundo del terrorismo.