En respuesta al diputado de IU, Felipe Alcaraz, Rodríguez asegró que Asensio no defiende los intereses de la cadena de televisión que preside, sino los suyos particulares, que son lo que realmente resultan amenazados por una eventual limitación a los contratos sobre derechos de imagen del futbol.

En este sentido, el secretario de Estado explicó que Antena 3 no tiene los derechos del futbol, sino que es una empresa, propiedad de Asensio, la que los posee y se los vende "cada lunes" a Antena 3.

Del mismo modo, otra compañía del empresario de la comunicación e la propietaria de todos los derechos de emisión en el extranjero de la producción de esta cadena televisiva.

Por todo ello, Rodríguez ha instado a la Cámara a no confundir la libertad de expresión con los intereses económicos particulares, de poder y de influencia de este empresario.

"Convendría no convertir las palabras libertad de expresión en una suerte de refugio para fracasos empresariales. El Gobierno no es culpable de las equivocaciones, malas decisiones, falta de iniciativa, errores o inersiones no rentables, ni en lo referente a las empresas de comunicación ni a ninguna otra compañía. Con todo, la libertad de los profesionales de este país para ejercer su trabajo se constata todos los días", aseguró.

Explicó, asimismo, que el pacto no escrito que tenía Asensio con la plataforma digital de Telefónica se rompió porque el empresario pidió una prima abusiva por la cesión de los derechos del futbol en poder su empresa.

Entre las tímidas protestas provinientes de los bancos socialists, Rodríguez reiteró que se siente "en el ojo del huracán de una guerra entre empresas de comunicación" de cuyo enfrentamiento, insinuó, se siente una víctima.

Aseguró que su intención es no judicializar la vida política, aunque insistió en que no descarta la posibilidad de recurrir a los tribunales para restablecer la verdad, aunque, a su juicio, el lugar idóneo para defeder su honor es el Parlamento.

Finalmente insistió en la falsedad de las supuestas amenazas que profirió contra José Oneto porue, de ser ciertas, "el señor Oneto no me hubiera vuelto a dirigir la palabra".

En este punto, Rodríguez dio lectura a dos notas que le remitió Oneto tras el estallido del escándalo que en tono cordial y amistoso no revelaban un nivel de tensión excepcional entre ambos.

De hecho, en la segunda nota de Oneto a Rodríguez, el periodista se pregunta "¿de que lado estoy?. Siempre del lado de los amigos. (...) Cuando me entero de que un amigo ha matado a una vieja pienso que algo habrá hecho la vieja". En su intervención, el diputado de IU, Francisco Alcaraz, supeditó la confianza de su grupo en el secretario de Estado a la presentación por su parte de iniciativas legales en contra de Asensio por haber emitido acusaciones falsas y, en caso contrario, reclamó la dimisión de Rodríguez para evitar que el Gobierno continúe bajo sospecha.