Según informó hoy la compañía, este resultado se debió principalmente a la buena marcha de las ventas de la división farmacéutica del grupo.

Así, las ventas de esta división anotaron en los seis primeros meses del año un crecimiento del 19%, tras alcanzar los 9.921 millones de euros.

La empresa atribuye este crecimiento a la fuerte demanda de los productos de tratamiento oncológico, a los pedidos de antigripal, así como otros medicamentos contra la osteoporosis.

Para el conjunto del año, Roche espera alcanzar un resultado "claramente superior" al registrado en el año 2005, y elevar la rentabilidad de sus acciones. Para ello, la división farmacéutica continuará tirando del grupo.