Roca explicó que su proyecto político sigue siendo el de CDC, aunque dijo que "todo el partido se ha fijado como objetivo su renovación y yocreí que como secretario general debía predicar dentro del ejemplo".

Según indicó, su renuncia al cargo debe interpretarse como una forma de "facilitar y ayudar a lo que debe ser la renovación del partido en el campo de las ideas, ilusiones, de todo aquello que pueda ir fortaleciendo cada más Convergència Democràtica".

Por su parte, el presidente del partido y de la Generalitat, Jordi Pujol, aseguró que Roca entrará en las páginas de la historia reciente de Cataluña y del Estado español y añadió ue el futuro político está abierto.

El presidente del gobierno catalán destacó "la gran importancia que da CDC y yo mismo a lo que ha sido el papel muy decisivo de Miquel Roca en todos estos años, tanto de cara al partido como de cara a Cataluña y a muchas cosas que afectan al conjunto de toda España".

En su opinión, "en los libros de España, de la historia política, habrá referencias claras y no poco importantes a muchas de las cuestiones que en Cataluña y en España, por su acción personal y a tavés del partido ha hecho Roca".

Roca dio a conocer su decisión de dejar la secretaría general del partido después de las últimas elecciones municipales y tenía previsto renunciar al cargo antes de los comicios autonómicos, aunque tras la pérdida de la mayoría absoluta de CiU decidió aplazar el anuncio hasta que Jordi Pujol fuera investido presidente de la Generalitat, hecho que se produjo ayer.

Miquel Roca, de 55 años, ha manifestado en las últimas semanas su intención de dedicarse al grupo muniipal de CiU en el Ayuntamiento de Barcelona, del que es presidente, trabajo que compaginará con su despacho profesional en Barcelona, donde volverá a ejercer como abogado, y las clases en la Universidad Pompeu Fabra.

Roca, miembro fundador de Convergència Democràtica en 1974, dejó la secretaría general de la formación en otras dos ocasiones, aunque por poco tiempo. La primera vez fue en 1981, en el sexto congreso del partido, cuando sectores afines a Jordi Pujol presentaron una candidatura alternativa

En octubre de 1992 alegó para dejar el cargo las malas relaciones del partido con Unió Democràtica de Catalunya, su socio de coalición. Sin embargo, fue reelegido de nuevo secretario general en enero de 1993 por una amplia mayoría.

El actual portavoz de CDC, Pere Esteve, que junto con el secretario de organización del partido, Ramon Camp, ha venido ejerciendo el trabajo de secretario general adjunto por delegación de Roca, será, con toda probabilidad, el sustituto de éste último, y se anunciará n el consejo nacional que celebrará el partido el próximo 7 de enero.