Matizó que de ese dinero, "mucho se podría haber ahorrado si no se cambiase el proyecto y, por tanto, la estructura del museo, lo cual ha demostrado que, cuando se inauguró en 1986, se actuó con mucha precipitación".

En opinión de Cortés, "un museo con carácter nacional, dedicadocontener los fondos estatales de arte moderno, no puede basarse en el capricho de Javier Solana, que era el responsable en ese momento, ni en el arbitrio de Jorge Semprún cuando se hace cargo del ministerio".

Con respecto a la destitución de Tomás Llorens, dijo que el proyecto que puso en marcha contaba con el respaldo del ministerio. "El mismo director general de Bellas Artes estaba a su lado cuando Llorens presentó su programa en octubre del año pasado", dijo.

"Llorens no ha cambiado. Las dispridades de concepción museística aludidas en su cese son achacables a un cambio de rumbo del ministro", añadió Cortés, "y la nueva línea adoptada por Semprún y por la nueva directora del Reina Sofía, María Corral, coinciden plenamente con las propuestas que el PP hizo hace tiempo".