El acuerdo se instrumentará a través de la Unidad de Negocio de Cargas de Renfe, aunque elmaterial rodante empleado pertenece a la compañía petrolera.

Dicho acuerdo se inscribe en la estrategia diseñada por Repsol Butano, que preside Juan Sancho Rof, para hacer más atractiva su oferta de butano y propano, - por seguridad, ahorro y rapidez- en los transportes, ante la competencia que se le avecina en este sector.

El volumen de tráficos de GLP acordados entre Repsol y Renfe para los próximos cuatro años es de 3.250.000 toneladas entre butano y propano, y se incluyen las transformacionesa efectuar por ambas partes, tanto del material rodante como de las instalaciones, para cumplir los nievles de seguridad y calidad que se contemplan en el acuerdo.

Renfe ha señalado que este contrato consolida la relación que mantienen ambas compañías desde hace años, y que en 1995 le supuso una facturación de unos 1.600 millones de pesetas.