La petrolera señala, además, que la mejora de resultados se prodjo a pesar de que el año pasado tuvo que hacer frente a mayores amortizaciones por la actualización de balances y a la congelación de precios del butano y propano que impuso el Gobierno en los siete primeros meses del año para controlar la inflación.

De no ser por estos dos factores, explicaron los responsables de Repsol, la petrolera habría obtenido un resultado al cierre del ejercicio un 25,4% superior al del 96.

A lo largo del 97, Repsol obtuvo un resultado por operaciones de 233.687 millones e pesetas, después de que los ingresos fueran de 3,2 billones de pesetas, un 15,8% más.

Las inversiones sumaron 507.766 millones de pesetas, las más altas afrontadas durante un ejercicio en toda la historia de la petrolera, y en su mayoría se han destinado a reforzar la posición internacional del grupo, especialmente en Latinoamérica.

Por áreas de negocio, la exploración y producción aumentó hasta los 45.484 millones de pesetas, un 44% más, a pesar de la bajada del precio del crudo compensada porla apreciación del dólar respecto a la peseta. la producción neta del grupo en sus yacimientos aumentó un 24%.

En el refino y marketing, que incluye la red de estaciones de servicio, Repsol registró un resultado de 110.824 millones de pesetas, un 36,3% más. Entre los motivos de la mejora está el elevado margen internacional del refino, y la apreciación del dólar.

La actividad química mejoró resultados en un 17,9%, y se colocó en 28.379 millones de pesetas, a pesar de la paralización de instalacioes fabriles en Tarragona.

Respecto al gas, los resultados fueron de 50.321 millones de pesetas, un 19,7% menos que en 1996. El grupo considera positivos estos resultados, porque tiene en cuenta que los gases licuados, butano y propano, permanecieron congelados de precio durante más de la mitad del año y las temperaturas del invierno fueron muy suaves, lo que redujo la demanda en fechas que debían ser punta.