Según informaron a Servimedia fuentes de Renfe, segundo gran consumidor de energía (electricidad y combustibles) del país, el acuerdo permitirá a la empresa ferroviaria ahorrarse de unos 600 millones de pesetas al año, sobre un consumo total estimado en 120 millones de litros de gasóleo A, al incluir todos los costes relativos al transporte del combustible hasta lo depositos de Renfe, la gestión de sus "stocks" y el mantenimiento de las instalaciones.

No obstante, la decisión de Renfe compensa, en parte, a la segunda gran petrolera del país, Cepsa, que en los próximos días firmará otro contrato con Renfe para encargarse del suministro del 25 por cien del gasóleo que necesita la empresa ferroviaria, y que permitirá abastecer las instalaciones de Sevilla y Miranda de Ebro (Burgos).

El compromiso de Repsol supone el abastecimiento, gestión de "stocks" y manteimiento de los depósitos de tracción que Renfe tiene en Madrid, León, Valencia y Barcelona. Según Renfe, los criterios empleados por la compañía para hacer la selección han sido la optimización del precio final en cada una de las zonas que debían ser abastecidas.