Según han informado portavoces de la compañía, esta decisión se inscribe en su política de reforzar el negocio petroquímico, en el que se están mejorando sustancialmente los márgenes, y una mayor apuesta por el negocio eléctrico, que permite autoabastecer las necesidades energéticas de ls plantas de Repsol y vender la electricidad excedentaria.

De hecho, la planta cogeneradora diseñada para Tarragona tiene una potencia de 68,1 Mw, cuando la demanda actual del complejo es de 42,5Mw. la inversión prevista para este fin es de 8.790 millones de pesetas y su entrada en funcionamiento está prevista para dentro de dos años.

Sin embargo, el mayor desembolso aprobado por Repsol para Tarragona será el de ampliación de la capacidad productiva, que absorberá del orden de los 20.800 millonesde pesetas.

Esta partida se desglosa en dos proyectos. Por un lado la mejora en un 10% de la capacidad fabril de Repsol Petróleo para elaborar etileno, materia prima que después emplea Repsol Química, y otras industrias petroquímicas de la zona, destinando a este fin 4.880 millones de pesetas.

También se ha proyectado un nueva planta de polipropileno en la que se emplearán otros 15.900 millones y una ampliación de la que ahora se dedica a producir polietileno destinando una de sus dos líneas fabrles a la elaboración de este producto específico para uso agrícola, lo que exigirá una inversión adicional de algo más de 3.000 millones.

Los responsables del grupo petrolero también han incluido en esta partida de inversiones otra de 3.300 millones para elevar la capacidad de desulfuración y recuperación de azufre siguiendo las últimas exigencias sobre protección medioambiental impuesta por la Comisión Europea para la elaboración de gasóleos.