Además, durante la ceremonia oficial del encendido de la llama olímpica celebrada hoy, tres representantes de RSF, entre los que se encontraba su secretario general, Robert Ménard, desplegaronhoy en Olimpia, Grecia, una banderola con la imagen de los aros olímpicos en forma de esposas.

Según informó hoy RSF, las fuerzas de seguridad detuvieron a los tres militantes de esta organización. "Si el fuego olímpico es sagrado, los derechos humanos lo son todavía más. No podemos dejar que el gobierno chino se apodere de la llama olímpica, un símbolo de paz, sin denunciar la dramática situación de los derechos humanos en el país, a menos de cinco meses de la inauguración de los Juegos Olímpicos", señaló RSF, que recordó "el trato que se da en China a quienes se expresan libremente", así como la censura que este país impone a la prensa.

Un centenar de periodistas, internautas y ciberdisidentes están encarcelados en China, "simplemente por expresarse pacíficamente", según datos de RSF, que recordó también que, desde el pasado 12 de marzo de 2008, los periodistas tienen prohibida la estancia en Tibet y se les expulsa de las provincias vecinas.

Según RSF, los periodistas chinos siguen trabajando bajo los dictados del Departamento de Publicidad (antiguo Departamento de Propaganda), "que impone la censura sobre numerosos temas".

"La autocensura impera en las redacciones", agregó hoy RSF. "Los medios de comunicación independientes en chino, con sede en el extranjero, están bloqueados o se ven acosados o interferidos, lo que impide la emergencia de un pluralismo informativo", añadió.