En un escrito remitido por Valenzuela al director general de RTVE, Jordi García Candau, asegura que la manipulación informativ que se dió en ese programa perseguía exclusivamente descalificar al magistrado de la Sala Segunda del Tribunal Supremo, mientras que el tema de fondo se obvió.

La consejera señala que el reportaje se dedicó a poner en duda, una y otra vez, al juez Barbero, al que se presentó como un personaje situado en el centro de la polémica, enfrentado al PSOE y al fiscal general del Estado.

Para respaldar sus afirmaciones, cita textualmente, entre otros ejemplos, el párrafo en que, sin citar fuentes, se deca que "la Sala Segunda del Supremo ha respaldado la actuación de Barbero, recomendándole únicamente una mayor celeridad. Sin embargo, algunos de sus compañeros de ese mismo Tribunal sostienen que está cometiendo errores derivados de un supuesto desconocimiento del derecho procesal".

Valenzuela recuerda a García Candau en su escrito que el Estatuto de RTVE exige la separación entre información y opinión, y establece que debe identificarse en su caso a quienes sustentan las opiniones difundidas.

Po último, asegura que el director general de RTVE debería solicitar su ingreso en el Libro Guinnes de los Records como "recordman de la manipulación informativa", ya que, en su opinión, ha demostrado suficientes méritos para estar en la próxima edición de esta publicación.