El acuerdo suscrito consiste en fijar las especificaciones del European Railway Traffic Management System (ERTMS) o Sistema Europeo de Gestión del Tráfico Ferroviario, de manera que un mismo tren pueda ir desde un extremo a otro del continente sin tener que cambiar ni su cabeza tractora ni el maquinista.

Miguel Corsini, presidente de Renfe y de la Unión Internacional de Ferrocarriles (UIC), explicó que la trascendencia del acuerdo está en que representa el primer paso para eliminar barrera técnicas que impedían una mayor liberalizacion del sector en Europa.

Este sistema europeo integrado se basa en las nuevas tecnologías, sobre todo el GSM mediante sistema de radio y la fibra óptica, y garantiza que todos los trenes nuevos que se vayan adquiriendo por las diferentes empresas ferroviarias europeas los vayan incorporando.

De hecho, Corsini adelantó que todos los trenes AVE que se compren mediante el concurso recientemente convocado para cubrir la línea de alta velocidad Madrid-Barceona-Frontera Francesa, van a llevar incorporada esta tecnología.

Las primeras pruebas piloto de este sistema europeo de gestión del tráfico se realizarán en España, concretamente en el tramo de vía entre Albacete y Villar de Chinchilla de la línea que une Madrid con Valencia y Alicante.

De Palacio aprovechó su presencia en el acto para animar a las empresas ferroviarias europeas a que sigan colaborando y apostando por la gestión con criterios de eficiencia, y dibujó un futuro del tren en Europa qe pasa por la competencia y la liberalización, pero guardando su carácter de servicio público.

Además, adelantó que tiene intención de promover medidas de apoyo a la creación de los corredores ferroviarios transeuropeos, para lo que advirtió que también hace falta un cambio de actitud de los gobiernos.